A través del trabajo conjunto, las organizaciones brindan apoyo y herramientas educativas a emprendimientos de agricultura familiar en distintas comunas rurales de la Patagonia, para potenciar el desarrollo social y comunitario.
Camuzzi y la Fundación Cruzada Patagónica, inician una nueva etapa del programa “Mujeres Huerteras y Emprendedores Rurales”, con foco en la provincia del Neuquén.
Esta iniciativa forma parte del compromiso de responsabilidad social de la empresa y busca promover el arraigo y el desarrollo de las familias campesinas, transmitiendo la esperanza que genera la autonomía económica, mediante la producción y comercialización hortícola y avícola en el propio entorno. A través del programa, las familias aprenden a diversificar y mejorar la calidad de los alimentos que obtienen de la tierra, como así también a producir subproductos y a comercializarlos, mejorando sus ingresos económicos y la propia alimentación familiar.
Este año, el programa se está llevando a cabo en las comunas neuquinas de Aucapán y Costa del Malleo, donde 31 mujeres participan activamente en talleres intensivos que combinan teoría y práctica. Los contenidos incluyen la preparación del suelo, la siembra y el manejo de invernaderos.
El cronograma de trabajo se extenderá hasta marzo de 2025, incorporando a las localidades rurales de Pilo Lil, Raquithué, Atreuco y Pampa del Malleo, todas ubicadas al oeste de la provincia, a fin de ampliar el impacto positivo en la calidad de vida de las comunidades rurales de la Patagonia.
El programa “Mujeres Huerteras y Emprendedores Rurales” nació en 2023, y tuvo como objetivo promover mejoras significativas en las infraestructuras productivas del paraje rural de Río Chico, departamento de Ñorquinco, ubicado a 170 km de Bariloche. En ese marco se organizaron múltiples encuentros con la participación de emprendedoras locales, quienes aprendieron técnicas avanzadas de producción y comercialización de productos agrícolas. También se realizaron talleres de elaboración de conservas, así como mejoras en los sistemas de riego e invernaderos. Además, estudiantes de las escuelas agrotécnicas de la propia Fundación Cruzada Patagónica aportaron sus conocimientos técnicos, promoviendo un valioso intercambio intergeneracional.
La alianza entre Camuzzi y Cruzada Patagónica tiene ya varios años de historia, enmarcada en el apoyo sostenido a las Escuelas Agrotécnicas y albergues estudiantiles que tiene la Fundación en las provincias del Chubut, Río Negro y Neuquén.
El proyecto “Mujeres huerteras y emprendedores rurales” es un nuevo desafío que las organizaciones se trazaron, que tiene un importante impacto local por su mirada 360 grados, ya que busca generar valor agregado en las propias comunidades rurales de donde provienen los estudiantes de la Fundación, para que sean también los pobladores y sus familias los que reciban, a través de la educación, herramientas para promover oportunidades de desarrollo.