La Comisión fue creada por la ley provincial de Trashumancia y está integrada por ocho representantes.
Luego de dos jornadas celebradas en Zapala y en El Alamito la Comisión de Huellas de Arreo ya cuenta con sus ocho representantes. La actividad fue convocada en el marco de la Ley Provincial de Trashumancia Nº 3016 y su decreto reglamentario 1106/1.
La subsecretaría de Producción del ministerio de Producción e Industria, que es el órgano de aplicación de dicha ley, fue el organismo encargado de la organización y coordinación de los encuentros. Las invitaciones fueron abiertas a todas/os aquellas/os crianceros individuales y organizaciones y comunidades que quisieran participar de las elecciones.
La Subsecretaria de Producción, Amalia Sapag, señaló que “es muy valorable que es la primera Comisión la que se va, antes no contábamos con una ley, una Comisión ni con estas asambleas como espacio de elección”. Destacó la participación “de los cuatro crianceros y crianceras del centro y los cuatro de la zona norte que dejan su cargo”.
“El ser elegidos y poner el esfuerzo, la dedicación y el compromiso con los logros y dificultades, es muy destacable. En nombre del gobierno provincial y de los presentes les quiero agradecer el trabajo que han hecho con una pandemia de por medio, las dificultades que tuvimos para movernos, las reuniones por zoom, habrá seguramente mucho trabajo para seguir haciendo”, expresó.
Destacó el trabajo del relevamiento de huellas de arreo y el acompañamiento de la dirección provincial de Tierras de la Secretaría de Desarrollo Territorial y Ambiente, y especialmente de los baqueanos para poder trazar el nuevo mapa de huellas. “Esto es producto de todos y ya estamos avanzando en lo que nos falta, que es determinar las servidumbres de paso”, indicó e instó a “cuidar las obras que se han hecho a instancias de esta Comisión”.
Los crianceros/as elegidos/as también se expresaron luego de la votación de los asistentes.
Silvia Claleo lonco de la comunidad Gelayco, sostuvo que “la trashumancia es una práctica ancestral y cultural que tenemos como pueblo originario pero que también llevamos adelante junto a otros/as productores/as y crianceros/as de la zona”. “En ese sentido vamos a trabajar con el resto de los compañeros/as y hermanos/as de la Comisión para cada uno de los crianceros/as y productores/as”.
Ruth Maliqueo, de la comunidad Maliqueo de Santo Domingo Abajo, dijo que tiene “grandes expectativas de poder ayudar y aportar a los demás productores/as que hacen trashumancia”.
Mario Carrasco, de Bajo la Guanaca, reelecto, se manifestó “contento porque nuevamente los productores me dan la posibilidad de representarlos, así que seguiremos trabajando”.
Su par, Blas Ortiz, también reelecto, agradeció “a toda la gente que nos acompañó y trajo su propuesta” y apeló a la responsabilidad de todos “de participar y acompañar más”. Destacó el trabajo realizado y la ley que los enmarca. También indicó la importancia de contar con el mapa de huellas.
Hortencia Calpan, de Chorriaca, sostuvo que “como mujer le puse el pecho para seguir adelante y representar a todos/as”.
Aldo Méndez, de Andacollo, señaló que “voy a agradecer a quienes me votaron y a los que no porque igual vamos a hacer el trabajo en conjunto para todos”. “A todos los conozco de hace muchos años, sé el trabajo que han venido haciendo y voy adelante como hijo de productor”.
Belisario Castillo, de Colipilli, sostuvo que “este equipo no va a trabajar en un solo lugar, se trabajará para todos porque esta es nuestra responsabilidad”.
Héctor Erice, de Trailathue, agregó que va a seguir “asumiendo el compromiso de siempre” y agradeció a su familia por el acompañamiento.
Los productores que dejaron la Comisión de Huellas de Arreo, también reflexionaron lo vivido. Marta Claleo de Santo Domingo centro, dijo que “tuvimos una buena experiencia, esto te tiene que gustar porque dejás mucho en tu casa para poder hacerlo”.
Fabián Espinoza del paraje Bajo La Guanaca, evaluó que “me quedo con una buena experiencia de haber sido elegido y de haber participado. La pandemia no nos dejó hacer más pero creo que los que vienen van a seguir trabajando en equipo y nos vamos a seguir ayudando”.
Luciano Huenten, de la Comunidad Millaín Currical, agradeció “todo el acompañamiento” y mencionó a su padre, un criancero recientemente fallecido, destacando que fue quien le enseño a luchar.
Ernesto Méndez del paraje Los Entierros y que participa de la organización de Leuto Caballo, señaló que está “agradecido del acompañamiento y de haber aprendido” y quedó a disposición de los crianceros/as entrantes para cuando necesiten su ayuda.