El Municipio en conjunto con la Federación Argentina de Asadores organizaron una verdadera fiesta en el corazón de la provincia del Neuquén. Desde el viernes hasta el domingo se vivieron tres días de degustaciones, clases, charlas y excelentes presentaciones musicales de renombre regional y nacional.

Zapala se sigue posicionado como sede de grandes eventos en el interior del territorio y nuevamente volvió a albergar a miles de personas que recorrieron el predio, buscando alguna delicia para el paladar o bien disfrutar de las presentaciones en el imponente escenario.

Tras la premiación del Campeonato Internacional de Asadores que coronó a Argentina como campeona, seguida de Brasil y Chile, la noche de sábado culminó a altas horas de la madrugada con diversas presentaciones en el escenario. El público no dudó en acompañar y no abandonar su lugar en el predio.

Ya el domingo y desde bien temprano las brasas comenzaron a calentar el ambiente, y el aroma a carne asada se apoderó del olfato de todos los presentes. Los equipos, con nervios, ansiedad y muchas ganas de hacer lo mejor posible, respetaron el reglamento a rajatabla y buscaron presentar el mejor costillar de todos.

Después de cuatro horas de cocción comenzaron a presentarse cada uno de los costillares entregados por la organización. Lo cual significó otra verdadera fiesta, y uno de los momentos más esperados para los comensales que bien temprano habían reservado su porción.

Luego de la deliberación se definió que el gran ganador de la fecha en Zapala fuera “La organización de Asadores Mapuches” ($100.000 en premios) , seguidos por “Los Aprendices” ($60.000) y “Casa Florentina” ($40.000) en segundo y tercer lugar, respectivamente.

Desde el Municipio en conjunto con la Legislatura se entregó un reconocimiento a los mejores tres equipos de nuestra provincia. Ellos fueron: la Organización de Asadores Mapuches, “Asadores JBC” y “Los Weñi”.

El Intendente Carlos Koopmann se encargó de hacer entrega de cada uno de los premios y además de confirmar a Zapala como firme sede para el año entrante.

Nuevamente, Zapala vivió una verdadera fiesta de asadores.