«A nivel nacional, Neuquén es principalmente conocida por el petróleo, pero es gratificante mostrar que también tenemos producción de lácteos. Para mí es un orgullo representar a la provincia que amo», afirmó Glenda.
Elaboran quesos frescos, saborizados y estacionados, yogur, leche fluida, dulce de leche y huevos pactoriles, pero no todo -aclara- es elaboración, sino que para llegar a esos productos, el trabajo en el campo requiere de muchas otras actividades. “Son muchas las labores y son las cosas lindas que uno hace”, agregó Glenda.
Con su proyecto, ha demostrado que los sueños pueden hacerse realidad con determinación y pasión. Ubicada a pocos metros del ingreso a la ciudad, su establecimiento, La Soñada, es un oasis verde que alberga 20 vacas holando-argentino y 500 gallinas ponedoras.
Más allá de la producción láctea, aspira a establecer una granja educativa para compartir su conocimiento y experiencia con la comunidad. Su historia es un ejemplo inspirador para todas las mujeres que sueñan con emprender y dejar su huella en el mundo empresarial, resaltando el potencial de la región más allá de su industria petrolera.
La actividad en la provincia:
Enmarcada en el Programa de Impulso a la Producción Pechera Neuquina, Glenda recibió asistencia financiera y acompañamiento por parte de la Subsecretaría de Producción de la provincia. Entre las herramientas de las que pudo disponer, viajó a Buenos Aires y a Pigué junto a otras productoras neuquinas para intercambiar experiencias y sumar conocimientos.
Esta línea de trabajo propone fortalecer y consolidar la actividad de tipo familiar con perspectiva de género promoviendo el agregado de valor bajo un marco de buenas prácticas de producción, manejo y elaboración de productos respetando la sustentabilidad ambiental y la inocuidad alimentaria.
Producción:
La producción de leche en la Provincia, viene ganando terreno dentro de las producciones de tipo familiar, destacándose por la calidad de los productos lácteos que se obtienen (principalmente quesos), y que permiten generar un ingreso extra a la familia rural.
Existen al menos 70 emprendimientos familiares identificados, distribuidos 45 en el Norte, 12 en el Sur, 10 en el Centro, 4 familia en el Este. Estos producen menos de 1000 litros diarios de leche fluida. En el 84% de los casos, son las mujeres las que llevan adelante las tareas de manejo del rodeo lechero, el ordeño y la elaboración de quesos y otros productos que venden localmente, con un gran horizonte de negocio.
La Provincia ha hecho aportes a las familias productoras para el desarrollo de infraestructura de sus salas de ordeñe y salas de elaboración; ha entregado máquinas de ordeñe portátil para caprinos y bovinos; generó un fondo de Financiamiento para desarrollar el agregado de valor de los subproductos lácteos como la elaboración de quesos, donde se priorice las Buenas Prácticas de Manufactura y manejo ganadero.
Y se suma el Programa de Inseminación Artificial y asistencia técnica a terreno, a través de los servicios del laboratorio de biotecnologías de Campana Mahuida, además de asistir a la tarea de muestreo para detección de brucelosis bovina, y enfermedades venéreas, que en el caso de productoras lecheras se agrega la detección de tuberculosis bovina, quedando de esta manera cubierta las principales enfermedades bovinas en el sector de lechería, algunas de importancia zoonótica.
Además, existe el programa de control y prevención de brucelosis bovina a través de la vacunación obligatoria a terneras de entre 3 y 8 meses de edad a través de técnicos habilitados por el SENASA. A través de técnicos territoriales se realizan tareas de asesoramiento y acompañamiento a las productoras lecheras en materia de manejo ganadero y asesorías en la obtención de líneas de crédito.
Se trabajó un fondo de Financiamiento para desarrollar el agregado de valor de los subproductos lácteos como la elaboración de quesos, donde se priorice las Buenas Prácticas de Manufactura y manejo ganadero.