La provincia del Neuquén, tierra de paisajes imponentes y tradiciones arraigadas, se prepara para recibir una vez más el ancestral ritual de la trashumancia. Este evento cultural, protegido y regulado por ley, representa no sólo un desplazamiento de animales, sino un legado histórico que conecta a las comunidades con su pasado y su entorno natural.
Con la llegada del otoño, los crianceros se convierten en protagonistas de este viaje, partiendo desde los campos de veranada en un emocionante recorrido hacia los campos bajos del Neuquén, conocidos como lugares de “invernada”. Atravesando cordilleras y valles, acompañados por sus piños de chivos, yeguarizos y vacunos, estos guardianes del legado ancestral emprenden su travesía con determinación y respeto por la tierra que los vio crecer.
La secretaria de Emergencias y Gestión de Riesgos, Luciana Ortiz Luna precisó que “este año el organismo dispuso un operativo integral para garantizar la seguridad de la trashumancia, que estará a cargo del Sistema Integrado de Emergencias del Neuquén (SIEN) y Seguridad Vial”.
Señaló que “se estableció un plan que abarca desde la prevención vial hasta la asistencia de salud en ruta. El marco legal que ampara esta práctica ancestral brinda el respaldo necesario para llevar a cabo el operativo en condiciones óptimas”.
Los trashumantes cuentan con callejones designados para su tránsito, así como con lugares de descanso adecuados a lo largo de su recorrido. Sin embargo, en algunas zonas, estos caminos se entrecruzan con rutas provinciales y nacionales, generando puntos de encuentro que requieren especial atención.
“Es en este punto donde la colaboración entre Seguridad Vial, el SIEN y los propios trashumantes cobra vital importancia. El acompañamiento en ruta asegura la integridad tanto de los animales como de las personas que participan en esta travesía de arreo cultural. Además, se establecieron acuerdos con los municipios y los crianceros para optimizar la coordinación y garantizar el éxito de la experiencia de seguridad integral”, destacó Ortiz Luna.
En este contexto, es fundamental que los conductores que transiten por las rutas del centro y norte neuquino estén atentos a la presencia de los trashumantes y sus animales. “La paciencia, la prudencia y el respeto son valores indispensables para garantizar un viaje seguro para todas las partes involucradas”, expresó.
“En este marco de acción, la Secretaría de Emergencia y Gestión de Riesgo de Neuquén hace un llamado a la colaboración y la consideración de todos los actores viales. Adoptando medidas de precaución y respetando las normativas establecidas, contribuimos a preservar esta invaluable tradición y a proteger la seguridad de nuestras comunidades. En este camino compartido, el cuidado mutuo es el mejor camino hacia un destino seguro”, enfatizó Ortiz Luna.