La fiscal del caso Natalia Rivera pidió la revisión de una decisión adoptada hoy por una jueza de garantías, que otorgó la prisión domiciliaria a un varón que está acusado por el femicidio de la adolescente Carina Barros Méndez, cometido en Buta Ranquil.
El pedido de revisión lo hizo durante la audiencia realizada por la mañana, y solicitó que hasta que se concrete la audiencia de revisión, el acusado continué detenido con prisión preventiva.
El acusado, fue imputado por el delito de femicidio triplemente calificado, por el vínculo, por mediar violencia de género y por alevosía, en carácter de autor.
Durante la audiencia realizada hoy mediante videoconferencia, la fiscal manifestó su rechazo a que la prisión preventiva que viene cumpliendo el imputado fuera sustituida por la prisión domiciliaria como requirió su defensa. La fiscal sostuvo que están vigentes los riesgos procesales por los cuales se impuso la medida de detención: de entorpecimiento de la investigación y para la integridad de la familia de la víctima.
Además, Rivera indicó que “la defensa no relató ninguna circunstancia fáctica nueva que morigeren los riesgos procesales. La emergencia carcelaria no es un argumento sólido necesario para avalar una prisión domiciliaria, cuando existen riesgos procesales y una solidez en la acusación”, sostuvo.
Por último, Rivera aseguró que el imputado, en caso de ser declarado responsable, se enfrenta a una pena de prisión perpetua. En ese sentido, manifestó la necesidad de que continúe detenido con prisión preventiva.
La jueza de garantías Leticia Lorenzo resolvió hacer lugar al pedido de la defensa y sustituyó la prisión preventiva por una prisión domiciliaria, en la ciudad de Rincón de los Sauces.
La jueza aclaró que la prisión domiciliaria se hará efectiva una vez que esté garantizada la colocación de un dispositivo de control y rondines policiales. Y avaló el pedido de la fiscal para que se empiece a cumplir una vez que otro tribunal revise la decisión y en caso de que éste la ratifique.
Asimismo, la magistrada mantuvo la prohibición al imputado de mantener todo tipo de contacto con personas que estén vinculadas con en el hecho. Además le hizo saber al acusado que en caso de incumplimiento, la fiscalía podrá requerir la prisión preventiva nuevamente.
El hecho:
El femicidio bajo investigación fue cometido el 26 de octubre de 2023. El acusado, le provocó lesiones a Barros con un cuchillo, entre las 2 y 3.30 de la madrugada. Lo hizo luego de ingresar al domicilio de la víctima, mientras ella estaba sola ya que su hermano y su padre habían salido hacia un incendio que se originó en una chacra cercana de unos familiares. Del incendio, el hermano de la víctima fue advertido por el acusado, quien lo llamó por teléfono previamente y le dijo que fuera hacia la casa de su abuelo “porque se estaba quemando”.
El acusado aprovechó esta situación para meterse en la vivienda y dirigirse hacia la habitación de la víctima. Allí le rompió el celular y comenzó a agredirla. Ella corrió hacia la habitación de su hermano que está en la parte exterior de la vivienda y, en ese momento, la atacó con el cuchillo provocándole lesiones que le causaron la muerte.
Durante la audiencia de formulación de cargos, la fiscal del caso planteó que el acusado y la víctima habían tenido una relación de noviazgo de alrededor de tres años, que estuvo signada por la violencia de género, la cual continuó una vez terminado el vínculo.