Los 110 años de Zapala llegan a una ciudad que, con el correr de los últimos años, ha sabido reconvertirse en materia ambiental gracias a diferentes acciones tomadas por el Municipio y el acompañamiento de sus habitantes.

Sin lugar a dudas el panorama de la localidad del centro de la provincia ha cambiado, con mejoras notorias y un cartel de presentación que invita a propios y extraños a ser parte de una ciudad que día a día ratifica su compromiso en mejorar la calidad de vida de sus vecinos.

Nuevos espacios verdes, clases de Educación Ambiental, ecoestaciones, campañas de reciclaje, vacunaciones y castraciones son algunas palabras que forman parte del vocabulario habitual de Zapala, adoptando medidas en pos de una ciudad responsable y amigable en cuestiones ambientales.

Todas estas acciones llevadas adelante por parte de los zapalinos comienzan cada vez más desde temprana edad, apuntando a generar esa conciencia tan deseada desde el hogar y la escuela, siendo en muchas ocasiones los niños y niñas quienes marcan el camino, enseñando a separar los residuos, a reciclar, a cuidar a nuestros recursos y a nuestras mascotas.

Sin dudas una de las grandes obras que se encuentra en ejecución y destaca por su importancia es la Planta de Tratamientos de Líquidos Cloacales, la cual permitirá tratar los efluentes y proteger uno de los recursos más valiosos con los que cuenta Zapala: su acuífero, que entrega un agua de extrema pureza y filtrada en forma natural.

Obras que no siempre “se ven” pero que son claves pensando en el presente y sobre todo en el futuro, tal cual lo indicó en alguna ocasión el Intendente Carlos Koopmann, haciendo especial énfasis “en la importancia y la necesidad de hacer esto para Zapala y para sus generaciones venideras”.

Por estos días el Matadero Municipal también se pone a punto para funcionar a pleno, con trabajos en la “línea de verdes”, pieza clave en el tratamiento de efluentes y una óptima eficiencia de los tratamientos biológicos.

Lograr todo esto y más no ha sido (y no es) tarea sencilla, ya que requiere del esfuerzo de todas las partes involucradas. Sin ese compromiso y responsabilidad asumida no hubiera sido posible conseguir esta Zapala de hoy en día, una localidad que “saca pecho” y “se planta” como el lugar de referencia del centro neuquino en materia ecológica y de sostenibilidad.

Zapala hoy celebra su historia y su presente, destacando enormes avances y logros significativos que posiciona a la ciudad como un ejemplo a seguir en la búsqueda de un futuro más verde y próspero para su gente.